Las miniaturas.
Hoy traigo al blog otra parejita que también se encargaron de hacer más grande el nombre de Ferrari. Fabricados por la extinta Fly, la firma madrileña de Rafael Barrios, estos dos GT hicieron historia en la edición del año 1962 de las 24 Horas de Le Mans, marcándose Ferrari un fantástico triplete junto al 330 TRI ganador de la carrera pilotado por la imbatible pareja Gendebien/Hill. El segundo puesto fue alcanzado por los pilotos del #19, los franceses Pierre Noblet y Jean Guichet; la tercera plaza del podium fue ocupada por l'Equipe National Belge que confió su 250 GTO #22 a los belgas Leon Dernier "Eldé" y Jean Blaton "Beurlys".
La historia del Ferrari 250 GTO comienza en 1961. La FIA había anunciado que para la temporada siguiente, la de 1962, el Campeonato del Mundo de Sport estaría reservado únicamente a vehículos GT (Gran Turismo), en un intento por acabar con la supremacía de Ferrari en dicho Campeonato, pués entre 1953 y 1961 los automóviles de Maranello habían ganado en 7 ocasiones. De esta manera, los Prototipos con los que Ferrari había dominado los últimos años no podrían optar al título.
Los GT debían ser coches perfectamente legales para poder circular por carreteras abiertas; también pertenecer a una serie de al menos 100 unidades. Esta cantidad era demasiado elevada para Ferrari por lo que Enzo, tan hábil como siempre a la hora de "burlar" el reglamento, pensó que en vez de construir 100 coches nuevos, lo mejor sería partir del exitoso Ferrari 250 GT SWB Berlinetta y modificarlo profundamente.
Giotto Bizzarrini era el ingeniero encargado del desarrollo del nuevo GT y en la primavera de 1961 empezó con las primeras pruebas de motor sobre el chasis 2643 GT, un 250 GT SWB al que se le había incorporado una carrocería ligerísima diseñada y fabricada por Pininfarina con un estilo parecido al del 400 Superamérica.
En Monza, en Agosto de 1961, comenzaron las primeras pruebas con una nueva carrocería más acorde con las ideas de Bizzarrini y más próxima a la definitiva. La carrocería de aluminio se realizaba artesanalmente en los talleres de Scaglietti y en su forma, por primera vez en un GT de Ferrari, se habían tenido en cuenta aspectos aerodinámicos. El frontal, afilado y bajo, contrastaba con el anguloso y casi vertical del 250 GT SWB.
Para la parte trasera se decidió utilizar una solución que por aquella época había puesto de moda Zagato en algunos Alfa Romeo Giulietta SZ y que proporcionaba evidentes ventajas aerodinámicas: la "coda tronca" (la cola truncada) con la particular característica de que el borde superior terminaba en un "esbozo" de spoiler que garantizaba mayor carga en el eje trasero a alta velocidad. Con esta configuración el coche llegaba a alcanzar los 280 km/h en la larga recta de Les Hunaudières, en el circuito de La Sarthe, Le Mans.
El coche finalmente poco tenía que ver con el 250 GT SWB del que tomó la base; Bizzarrini modificó profundamente el chasis, situando el motor lo más atrasado que pudo. Mientras, Carlo Chitti se encargó de afinar el V12 de 2953 c.c.: introdujo nuevos árboles de levas, nuevos colectores de escape y redimensionó las válvulas. En el centro de la "V", se colocaron los 6 carburadores Weber de doble cuerpo que alimentaban la "bestia". El resultado: unos 300 CV a 7.500 rpm.
Para que el motor pudiera "respirar" se practicaron tres aperturas con forma de media luna en el frontal. Así mismo, el aire caliente del vano motor se evacuaba por medio de dos branquias laterales situadas entre la rueda y la puerta en los primeros modelos, que se convirtieron en tres posteriormente. Las llantas de 15" eran las típicas Borrani de radios cruzados.
Con un interior en el que no había ni velocímetro y con todas las ventanillas de plástico, excepto el parabrisas, apenas cumplía la norma que obligaba a que el coche fuera apto para carretera. Además, como se ha dicho antes, Enzo Ferrari nunca tuvo la intención de construir 100 unidades; él se excusaba diciendo que el coche era una evolución del 250 GT SWB, un coche ya homologado en GT… y eso el reglamento lo permitía. Al final, tras muchas trabas, se consiguió el visto bueno de la FIA.
En principio el coche se iba a seguir llamando 250 GT Berlinetta, pero una vez conseguida la homologación, la FIA envió la confirmación a Maranello en un telegrama que decía algo así como: "FERRARI 250 GRAN TURISMO OMOLOGATA". La prensa interpretó que este era el nombre del nuevo coche y tras la confusión finalmente hasta la propia Ferrari aceptó la denominación GTO.
En Febrero de 1962 el coche se presentó a los medios de comunicación y su debut en competición fue en Marzo, en las 12h de Sebring, la segunda cita de la temporada. El resultado fue magnífico, segundo tras un Prototipo Ferrari (aunque no puntuaban para el Campeonato, los Prototipos podían seguir corriendo) y por supuesto primero en GT.
La temporada completa fue un monólogo de Ferrari. El 250 GTO ganó todas las carreras en categoría GT en las que participó menos una, que fue a parar a manos de... un 250 GT SWB. Por supuesto a final de año, Ferrari logró el Campeonato. Si lo que quería la FIA con el cambio de reglamento, era destronar a los italianos y dar una oportunidad a sus rivales, el tiro les había salido por la culata.
En 1963 comenzó una nueva temporada y a los Jaguar y Aston Martin del año anterior, se sumaban como enemigos los Cobra de Carol Shelby. Nada cambió... Ferrari volvió a arrasar: doblete absoluto en Daytona; primero, segundo y tercero en su categoría en las 12h de Sebring, tras otros tres Prototipos de Ferrari; segundo de los GT en la Targa Florio tras un Porsche 356 que se adaptaba mejor a las sinuosas carreteras sicilianas; segundo absoluto en los 1000 km de Nürburgring y primero, cómo no, entre los GT.
Llega Le Mans y es la apoteosis: ¡¡¡ seis Ferrari en los seis primeros lugares !!!, un 250 GTO fue segundo absoluto y primero entre los GT. Doblete en el Tourist Trophy, en el Tour de France… IMPRESIONANTE. Los Aston Martin sólo ganan en Monza, donde otro 250 GTO había sido segundo; y los Shelby Cobra ganan la última carrera, con poca presencia de Ferrari. Consecuencia: otro Campeonato más que se iba a Maranello.
Para 1964 se presenta una evolución del GTO, el motor y el chasis no se tocan, pero se montan nuevas ruedas más anchas y una nueva carrocería completamente distinta. Sin embargo, ante un nuevo cambio de reglamento para 1965 que volvía a dar protagonismo a los Prototipos, Ferrari se centró en éstos, descuidando un poco el desarrollo del GTO. A pesar de ello y de la creciente competitividad de los Shelby Cobra Daytona apoyados claramente por Ford, los dobletes en Daytona, Tour de France y el triplete en Spa, aseguraron a final de año el tercer título consecutivo para el GTO.
En 1965 los prototipos vuelven a puntuar para el Campeonato del Mundo lo que provoca el final de la historia del maravilloso Ferrari 250 GTO…
Ferrari 250 GTO 2nd LM 1962 #19
Ferrari 250 GTO 3rd LM 1962 #22 (Colección Mulsanne Stone).
Muy, pero que muy bueno! "Con tu permiso" lo recomiendo por twitter
ResponderEliminarUn saludo.
Con este modelo se debe cumplir el dicho de : hecha la ley,hecha la trampa,.......genial Enzo y genial el artículo.
ResponderEliminarSaluti bambino.
Edito:sorry.
Wenas!!! Fantástica entrada Alex, un coche que es una verdadera preciosidad, tengo que reconocer que al principio no era de mis preferidos, pero poco a poco me ha ido calando y ahora es una obsesión conseguirlos jaie iaei aje
ResponderEliminarLa historia, genial!!!!
Adeu y gassss
Qué maravilla!! Sencillamente fabuloso.
ResponderEliminarJoan, ojo que engancha ;)
Salud
Heyyyyy...... gracias chicos!!!! Sois tan gentiles con vuestros comentarios ejejejejejej.....
ResponderEliminarLa verdad es que me ha gustado mucho enlazar los tres últimos Ferrari... creo que por historia se lo merecía y he disfrutado y aprendido mucho...
¡¡¡ Yy a ver si participa más gente, que siempre son los mismos !!!! jejejejejej... Un saludazo...
Yo tengo el truco, si quieres que participe más gente, pon fotos de tías mezcladas con coches... Siempre puedes decir que son Pit Babes de Lemans o trabajadoras de los alrededores del circuito. Jijiji...
ResponderEliminarOtra opción es la de sortear el coche fotografiado entre los que hacemos un comentario... ¿qué te parece?
ResponderEliminarBromas a parte... es muy difícil aportar algo cuando se realiza un post tan elaborado. FELICIDADES!!!!
Gracias Victory por la idea, pero ya lo he intentado anteriormente y ni el mejor culito de una de las Hawaiian Tropic consiguió un sólo comentario.... cero patatero!!!...
ResponderEliminarGracias Enric por ser tan bueno conmigo, pero apenas hago la reseña del coche... bien sabes que de cualquier modelo "lemans" se pueden escribir páginas y páginas y más páginas...
Un abrazote...
Me ha encantado Alex,
ResponderEliminarEl 250 GTO es uno de mis preferidos y la versión de Fly es realmente destacable. Tengo el 22, pero no el 19 y la verdad es que me tengo que controlar para no añadir una nueva subcolección de 250 GTO. Que no está la cosa para gastar con tanta alegría.
En cuanto a la jugada de Enzo, fue portentosa aunque en el 65 se la hicieron a él los equipos de la competencia y en Ferrari no estaban tan preocupados con los GT como anteriormente, lo que acabo significando el final de las vitorias absolutas del Cavallino en La Sarthe.
Un abrazo.
Felicidades por el artículo, es genial! la inquietud de investigar el linaje de nuestros modelos de slot hacen crear maravillas de blogs como este que se empieza a convertir en favorito junto con el de Joan y Demo.
ResponderEliminarUn abrazo a todos desde México.
Israel V.