El BMW 3.0 CSL, con el que Alexander Calder
puso la primera piedra para la realización de la colección BMW Art Car en 1975,
fue también una de sus últimas obras de arte antes de su muerte. Como un
escultor que habitualmente diseñaba sus propias formas, Calder logró liberarse
de la estructura formal de los coches de carreras y de la pintura como arte y
aspiró a darle su propia marca distintiva. Como en el caso de sus esculturas y
móviles, usó colores intensos que distribuyó generosamente sobre toda la
carrocería.
Nacido en Filadelfia en 1898, Alexander
Calder comenzó su carrera como ingeniero y sólo entonces se decidió a seguir
los pasos de su padre y de su abuelo, escultores. Sintiéndose tan atraído por
el arte como por la tecnología, desarrolló su propia y única forma de
escultura. Sus enormes creaciones poseen, sin embargo, un aspecto ligero y
flotante. Se hizo famoso por sus móviles abstractos que fueron aclamados por la
crítica como las más innovadoras esculturas americanas del siglo XX. Murió en
Nueva York en 1976 a la edad de 78 años.
BMW 3.0 CSL: motor de seis cilindros en línea, cuatro válvulas por cilindro, doble árbol de levas, 3210 cc de cilindrada, 480 cv de potencia y una velocidad punta de 291 km/h.
En 1975 este BMW Art Car diseñado por Alexander Calder fue inscrito en las 24 horas de Le Mans por el team francés Hervé Poulain y pilotado por el estadounidense Sam Posey, así como por Jean Guichet y el mismo Hervé Poulain, ambos franceses. Fue la primera y última vez que el coche fue utilizado en las carreras. Después de siete horas el auto tuvo que abandonar debido a un cardan defectuoso. El coche ha estado en exhibición desde entonces.
En 1975 este BMW Art Car diseñado por Alexander Calder fue inscrito en las 24 horas de Le Mans por el team francés Hervé Poulain y pilotado por el estadounidense Sam Posey, así como por Jean Guichet y el mismo Hervé Poulain, ambos franceses. Fue la primera y última vez que el coche fue utilizado en las carreras. Después de siete horas el auto tuvo que abandonar debido a un cardan defectuoso. El coche ha estado en exhibición desde entonces.
Hijo de padres de ascendencia italiana,
Stella nació en 1936 en Malden, Massachusetts. Comenzó a estudiar a la temprana
edad de 14 años en la Academia Phillips en Andover. Tras graduarse en Historia
por la Universidad de Princeton en 1958, instaló su estudio en Nueva York. Fue
entonces cuando surgieron las "Transitional Paintings" y las
"Black Paintings". A la edad de 23 años realizó su propia exposición
en el MOMA, Museo de Arte Moderno de Nueva York. Durante los años sesenta sus
lienzos pop art "post-abstracto" tuvieron su lugar en la historia del
arte. De 1960 a 1980 Stella expuso su obra en todo el mundo. Luego el cada vez
más profundo relieve de sus pinturas dio lugar a una completa
tridimensionalidad.
Al diseñar en 1976 el BMW 3.0 CSL, Stella se
desvinculó de su estilo original (basado en utilizar simplemente el patrón de
una pincelada para crear su obra) y buscó la inspiración en la fascinación de
este coupé de carreras. Creó una cuadrícula cuadrada en blanco y negro, con
gran precisión sobre un papel milimetrado de gran tamaño. Este patrón de papel
milimetrado atravesó la carrocería entera, capturando formalmente y
describiendo con precisión cada curva y cada rincón. El diseño de la Art Car
marcó su punto de inflexión en la tridimensionalidad.
BMW 3.0 CSL: motor de seis cilindros en
línea, cuatro válvulas por cilindro, doble árbol de levas, 3210 cc de
cilindrada, 750 cv de potencia y una velocidad punta de 341 km/h.
En 1976, el coupé pintado por Stella
participó en la carrera de las 24 Horas de Le Mans, un estreno particularmente
excepcional para el trabajo de un entusiasta del automovilismo deportivo. En el equipo los pilotos Peter Gregg (USA), Brian Redman (GB) y Hervé Poulain (FRA) que no llegó a dar ni una vuelta. Desafortunadamente, por problemas técnicos el coche no logró finalizar la
prueba.
Miniaturas RTR del BMW 3.0 CSL fabricadas en
plástico por Fly Car Models y figuras en resina de Preiser (Colección Mulsanne Stone).